Votar en Venezuela es ser cómplice de un fraude
Aleksander Boyd entrevista a Luis DE LION
Londres 08.09.06 | Existen puntos de vista encontrados sobre la participación en los comicios electorales venideros. Los analistas políticos venezolanos parecen estar divididos entre dos corrientes –abstencionista y participativa- propulsadas por argumentos que merecen ser explorados, entendidos y promovidos, de ser necesario, para así poder encarar exitosamente el descomunal reto que representa sacar del poder democráticamente al golpista apátrida. Luis DE LION, respetado analista y editor de la excelente pagina webarticulista.net, accedió a responder algunas preguntas que, en aras de promover el entendimiento sobre las distintas corrientes, le envié sobre el tema. A continuación mis preguntas en negrillas y sus respuestas.
Luis tu mantienes que la actual candidatura unitaria de Rosales tiene visos de Coordinadora Democrática y podría estar repitiendo errores del pasado al ignorar la inexistencia de condiciones electorales fiables y legitimas. Partiendo del principio que tan solo a través del voto se puede rescatar la democracia en Venezuela, cual debería ser en tu opinión el norte de dicha campaña?
Observando la composición del comando de campaña del candidato Rosales, resurge la imagen de una Coordinadora Democrática en cuyo seno se había enquistado una unidad forzada, contrahecha y poco clara. Un aparato que no logró imponer ninguno de los puntos de su agenda. Siempre fue el régimen el que dictó la pauta; a través de dilaciones, de los llamados reparos, de condiciones inaceptables, entre otros aberrantes impedimentos, los cuales en su conjunto la CD aceptó, porque se creía –sin mayores argumentos– protegida por un blindaje infalible el cual solo existía en la imaginación de sus líderes. Muchos de esos dirigentes, mariscales de la derrota, forman hoy parte del extenso y variopinto comando de campaña del candidato Rosales.
En consecuencia, en la actualidad, en medio de la euforia y de las caravanas, percibo distracción en la orientación que se le está dando a la campaña de Rosales. En principio, me causaron alarma las declaraciones del director nacional de estrategia Teodoro Petkoff, quien el propio día en que Rosales inscribía su candidatura ante el CNE, señaló que la campaña no debía “empantanarse” en la lucha por las condiciones electorales. Luego, el candidato Rosales en ninguno de sus discursos menciona los graves vicios del sistema electoral, al tiempo que dice que va a ganar y va a cobrar, me pregunto si es que también se siente blindado.
No soy un experto en campañas electorales, soy solamente el editor de un portal digital; oficio éste que me exige seguir muy de cerca la actualidad política nacional, una apasionante actividad que además se nutre con el constante intercambio de opiniones y puntos de vista con políticos, intelectuales, empresarios, analistas, periodistas y lo mas importante con nuestros lectores. Todo ello te conlleva a la formación de un sólido criterio a través del cual concluyes, en el caso específico de la situación electoral venezolana; que si el candidato de oposición no asume como norte de su campaña electoral la lucha sin desmayo porque los venezolanos puedan ir a votar bajo condiciones electorales dignas, se habrá institucionalizado un desequilibrio, que en la practica le permite al régimen chavista imponer, sin impedimento alguno –interno o externo- su voluntad electoral y en consecuencia engrandecer su mito democrático.
De no aceptar el CNE -como se espera- condiciones impuestas por la oposición que van al estricto cumplimiento de normas y legislación electoral vigente, que otra solución dentro del marco democrático debería explorarse?
De momento votar bajo estas humillantes condiciones, te hace cómplice del fraude y entras de lleno en el plano antidemocrático. En diciembre pasado una abrumadora mayoría de venezolanos –chavistas y de oposición- se negó a formar parte del fraude. Una vez que los ciudadanos cumplieron con su deber, llegó la hora de los políticos ponerse a pensar en definir los escenarios a explorar. Los intelectuales también están en la obligación de aportar ideas. Pero no me hago ilusiones, faltan menos de tres meses para las elecciones, y de momento, solo pareciera haberse explorado la plástica tanto del candidato de oposición, como de la hipotética primera dama, así como los colores de las franelas que deben llevar los simpatizantes de la llamada oposición unitaria.
De Rosales se espera que le hable al país con la verdad. Ni sus anuncios ultra populistas, como la tarjeta de débito “mi negra”, ni sus frases cortas, pero desafiantes, del estilo promesa de no sentársele en las piernas a ningún presidente extranjero, en clara alusión a la relación Castro-Chávez, servirán de nada si su accionar no viene respaldado de un alerta serio ante la grave coyuntura venezolana.
Las revoluciones no se derrotan con simples lemas electorales.
Rosales está hoy montado sobre el portaviones de la candidatura unitaria, algo que le otorga una potencia y una visibilidad, que pocos líderes de oposición han disfrutado. Desde esa poderosa plataforma, debe Rosales alzar la voz y decirle a todos los venezolanos que éste régimen bolifascista nos cerró la salida electoral, y actuar en consecuencia, es decir, darle a los venezolanos la ruta a seguir, desde ya y para después del 3 de diciembre, dentro de un movimiento programado de resistencia civil. De no hacerlo, Rosales habrá desaprovechado el momento y correrá no solo el riesgo de terminar sentado en las piernas del fraude, sino que, peor aún, en el colmo de las paradojas terminará haciendo el mismo ridículo que en México está haciendo el otrora candidato chavista, Andrés Manuel López Obrador.
Existe una gran desconfianza hacia el árbitro electoral. Este hecho no ha sido paliado en lo absoluto por una directiva empeñada en desandar el camino y forzar ilegalmente la utilización de las maquinas captahuellas, a pesar de lo demostrado en presencia de observadores internacionales en Fila de Mariches el 23 de Noviembre del 2005. Como percibes esta actitud poco conciliatoria y cual es el objetivo de la misma sino el de promover la abstención?
Con anterioridad a la fecha que tú señalas, se conocían informes serios y objetivos, que denunciaban además de las captahuellas, al REP, al sistema de cedulación y los programas de las máquinas de votación y su fraudulento accionar tanto en Venezuela como en los EE.UU. Información que desde la misma madrugada del 16 de agosto 2004 se comenzó a disponer.
Los regímenes de corte autoritario, como el de Hugo Chávez, no es precisamente la conciliación lo que los distingue.
La llamada revolución bolivariana, para alcanzar sus objetivos se ha valido de toda la infraestructura institucional sobre la que se había sostenido el Estado venezolano hasta 1998. Una vez secuestradas las instituciones democráticas, las mismas fueron puestas al servicio único y exclusivo de la revolución.
Tiene gran valor la incautación del poder electoral, por cuanto es dicho poder el que le ha permitido a Hugo Chávez construir una fachada democrática, a través de una serie de fraudulentos eventos electorales, en los cuales, al menos hasta diciembre del 2005, había participado de manera cándida y desentendida el grueso del electorado venezolano.
Dicho esto, queda claro que el objetivo del régimen no es promover la abstención y ante el temor de una abrumadora abstención en las venideras elecciones presidenciales, ha comenzado la persecución de líderes políticos que militan por la abstención, tal y como es el caso de Henry Ramos Allup y Oswaldo Alvarez Paz, recientemente mencionados por el inefable Fiscal General.
Y hablando de abstencionismo, por qué crees que se ha tratado de estigmatizar al sector que aboga por el mismo?
El gobierno de su lado; en su lógica autoritaria, pretende perseguir a los abstencionistas, asustándolos y chantajeándolos. Por otra parte; sin razón alguna, tanto desde el comando de Rosales, como desde los teodoristas de la izquierda sifrina, los cuales tienen monopolizadas las principales tribunas de opinión, parecen haberse puesto de acuerdo, a través de unas brumosas interpretaciones, para concluir que abstencionista rima con colaboracionista.
Grave error comete éste sector de la oposición, al despreciar y desconocer a un amplio sector de AD, a Alianza Popular, a Alianza Bravo Pueblo y otros grupos que se mantienen en la posición abstencionista. Las razones que explican ésta irracional actitud provienen de la interminable crisis de banalidad que padece una parte de la oposición venezolana. Una enfermedad que aún bajo las circunstancias de la auspiciosa candidatura de Rosales les impide imponer ideas que vayan en contracorriente de las ideas impuestas por la nomenklatura chavista.
El show de fuerza protagonizado por Rosales con motivo del registro de su candidatura en Caracas dejo perplejos a propios y extraños. Que opinión te merece la corriente que indica que AD estaría trabajando fuertemente en su candidatura a pesar de apariencias publicas que sugieren lo contrario?
La fuerza que demostró Rosales al inscribir su candidatura, el pasado 19 de agosto no me parece nada sorprendente. Percibí como un hecho normal, el que un candidato que está siendo apoyado por 26 grupos políticos, se haga acompañar por los simpatizantes de dichos movimientos al momento de oficializar su candidatura antes las autoridades electorales.
Para nadie es un secreto que Rosales proviene de las filas de AD, y que además sus asesores más cercanos, así como muchos miembros de su comando, son en su mayoría adecos. En ese sentido, el comando Miranda, desde un primer momento buscando desprestigiar a Rosales, cuando se refieren a éste lo presentan como el candidato adeco. Pero eso, no vas mas allá de la corriente de opinión que sostiene, que el país político no está listo para recibir con los brazos abiertos la resurrección de un partido como AD. Solo el tiempo y las circunstancias lo dirán. En ese sentido y a riesgo de lucir como un extraterrestre recomiendo la lectura del informe que el CEN de AD le presentó al Comité Directivo Nacional el pasado 7 de agosto. Entre otras cosas, de dicho documento se desprende que sigue viva la ideología y la posición de centro izquierda, socialdemócrata y progresista del partido, que fundara Rómulo Betancourt y que a pesar del empeño que ponen hoy los milicos encargados de la reescritura de nuestra historia contemporánea, no podrán, a pesar de los múltiples errores cometidos por los últimos gobiernos adecos, desconocer la inmensa obra de ingeniería social que AD llevo adelante en Venezuela.
En cuanto a Ramos Allup y su dizque persistente lucha por las condiciones; esta AD jugando en varios frentes y si es así con que finalidad? No crees que AD estaría tratando de capitalizar sobre el caudal político representado por el sector abstencionista?
No dispongo de elementos para concluir que AD esté jugando en varios frentes. En el caso que lo estuviesen haciendo, además de razones prácticas, deben tener razones políticas.
Cuando se trata de desalojar del poder a un régimen abiertamente autoritario la lucha no puede reducirse al mero combate electoralista.
La línea oficial del partido AD es la lucha por unas elecciones libres y transparentes. La capitalización o no del caudal político que representan los abstencionistas, es algo que estaría por verse.
Algunos analistas piensan que para poder forzar una solución democrática debe contarse con un capital de apoyo formidable a nivel nacional. No crees que el "retorno de la esperanza" -como ha sido denominado por algunos el proyecto Rosales- logre movilizar al pueblo opositor como lo hiciera la otrora popular Coordinadora Democrática?
Debemos ser pragmáticos, no basta con solo movilizar al pueblo opositor. En el pasado, la CD contaba con una altamente movilizada militancia de oposición y sin embargo la dirigencia de la CD se dejó imponer unas inaceptables condiciones.
Ahora nuevamente juntos, pueblo movilizado y el llamado proyecto Rosales, deben en primera instancia obtener la realización de unas elecciones transparentes. De no lograrlo, Rosales no habrá sido otra cosa que un candidato meramente efectista.
Crees que se ha planteado a nivel estratégico la implementación de un plan B llegado el caso que Hugo Chávez decida robarse las elecciones nuevamente, como muchos esperan sucederá?
Yo me pregunto si existe al menos un plan A.
send this article to a friend >>