Carbón en Venezuela, el nuevo juego
Leocenis García | Soberania.org | 05/09/05
Lo único que estamos comprobando con nuestra política minera es que no somos antiimperialistas, al contrario, trajinamos el mundo gritando a todo pulmón que necesitamos una gran metrópolis o un gran imperio que nos domine; sino es EE.UU. que sea Brasil, o cualquier otro. El quid es hacer cumplir esa teoría de dependencia de la que hablaba Germán Carrera Damas en el "Dominador Cautivo".
Casi el 96 % del potencial carbonífero de Venezuela está en el Zulia, lo que equivale a 0,5% de las reservas mundiales de carbón. Hoy el patio de conflicto carbonífero en el Zulia es una zona ubicada al norte de la Sierra de Perijá llamada Socuy. Un acuerdo suscrito este año por los presidentes Lula y Chávez así lo prescribe, como da cuenta el documento constitutivo en donde actúan como representantes: Carlos Eduardo Martínez Mendoza, titular de la Cédula de Identidad Nº V-3.861.749, actuando en su condición de presidente de la sociedad mercantil CARBONES DEL ZULIA, S.A. y la señora Maritza Mészáros, titular de la Cédula de Identidad N° 6.555.154, en representación de ITABIRA RIO DOCE COMPANY LIMITED. Esta compañía está sujeta a las leyes de Bahamas, con oficinas registradas en Lyford Manor, Lyford Cay, P.O. Esta compañía es propiedad en 100% indirectamente de Compañía Vale do Rio Doce.
Vale Do Rio Doce que tiene proyectos en Venezuela, China, Australia, Mongolia y Mozambique, necesita importar combustible fósil, especialmente carbón para sus necesidades energéticas; y para ello deben buscar energía donde es barata, para traerla a Brasil a precios competitivos, según lo ha reconocido su presidente Roger Agnelli. Y esta administración les entrega la tierras de los indígenas en el Zulia a ésta multinacional brasilera, porque estas leyes habilitantes lideradas por Luis Miquelena fueron una vulgar trampa, habida cuenta que basándose en ellas concretamente en los articulo 8, literal 5, 10, 15 de la ley de Demarcación de Hábitat y Tierras de los Pueblos Indígenas, y el articulo 12 de la constitución; la llamada soberanía de los indígenas sobre su tierra llega sólo a dos metros bajo tierra: Donde haya carbón o petróleo serán igualmente desplazados.
Históricamente se conoce el potencial carbonífero del Zulia. En enero de 1992, la Dirección de Información y Relaciones del Ministerio de Energía y Minas, precisaba que la cuenca carbonífera del Zulia, ubicada principalmente en los distritos Mara y Páez, está constituida por más de 20 mantos con un espesor de más de 30 mts. Los carbones son brillantes con intervalos bandeados. Las reservas de las que hablaban entonces entre estos dos municipios eran de 800.000.000 TM hasta los 500m. de profundidad.
Las nuevas minas en los ríos Socuy, Maché y Cachirí, y en las cercanías de la represa Manuelote por parte de las empresas multinacionales del carbón enquistadas en Carbozulia/Corpozulia, ha aterrorizado a los indígenas que habitan la zona. Detrás de la ampliación de la producción de carbón en el Zulia están diversas compañías multinacionales como Anglo American Coal, Ruhrkohle, Tomen, Excel , Inter American Coal, Chevron Corporación, TransMar Coal Inc., Carbonífera Caño Seco, C.A., Corporación Carbones del Perijá, C.A., Consulminca, Carboca, Compañía Vale do Rio Doce, Minera Maicca, C.A , Carbones de Perijá, C.A Carbones del Socuy, C.A., Transportes Coal-Sea de Venezuela, C.A., COSA/Cipower Service Limited, Inespa, Alkyon Hidraulic Consultancy & Research, Royal Haskoning, Marcel van der Berg, Gerardo de Veer y otros. Las mismas responden básicamente a intereses exógenos.
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