placeholder
header

home | Archive | analysis | videos | data | weblog

placeholder
news in other languages:
placeholder
Editorials in English
fr
Editorials in Spanish
esp
Editorials in Italian
ita
Editorials in German
de

placeholder

VENEZUELA: PLAN CONSENSO PAÍS, PROGRAMA DE GOBIERNO PARA LA TRANSICIÓN

Por Arquímedes Espinoza, tomado del Gusano de Luz

Se ha hecho pública la propuesta de Consenso que agrupa a la oposición venezolana. A escala nacional se ha presentado el programa que expresa la voluntad de todo venezolano que aspira a alcanzar la unidad y la paz, y en cuya elaboración participaron los sectores representativos de la unidad nacional que viene actuando por la realización del Referendo Revocatorio, verdadero contraste frente al proyecto limitativo y unipersonal impuesto por el actual gobernante y expresado en el grupo que hasta hoy se ha apoderado del país, cuyo término de mandato está fechado para el próximo 15 de agosto.

Consenso es la opinión de todos. Desde el chofer más humilde de un barrio caraqueño que aspira a una mayor seguridad en su entorno, pasando por la asistente del hospital que solicita la dotación para la atención de todos y no de un sector; el joven que quiere tener un futuro con estudios y empleo seguro, hasta el especialista en vivienda, en salud y en petróleo, expusieron sus criterios de lo que debe ser el país de unidad que todos soñamos tener en el futuro una vez sea revocado Chávez y su régimen.

No le falta razón al coordinador del equipo de Consenso País Diego Batista Urbaneja, cuando expresa que nunca en la historia se había propuesto un plan de gobierno a partir del amplio mecanismo de consultas que contó con el acuerdo de 10 partidos políticos, 26 organizaciones de la sociedad civil, 28 organizaciones sectoriales que conforman la fuerza productiva y laboral del país, y 5 grupos de opinión.

Aunque mucho se ha repetido que la alternativa al actual régimen de gobierno no tiene un programa que presentarle a los venezolanos, el venidero proceso revocatorio no es unaconfrontación de proyectos en el que se busca convencer de la bondad de los mismos, sino una evaluación de la gestión de un gobierno sectario que en estos seis años se ha caracterizado por la confrontación, la desunión nacional y el empobrecimiento de las personas y las instituciones.

Por consiguiente, la mejor demostración de lo que queremos superar necesita un correlato de programa transitorio que adopte lo valorable y suplante la experiencia fracasada. Eso se expone en el compendio de lineamientos definidos en este esquema de emergencia para recuperar los avances logrados en esta etapa democrática y recomponer las bases de un país alineado hacia el futuro, en síntesis, la propuesta que lleva el nombre de Consenso País, modelo que se nutre de otros proyectos tributarios de proposición nacional como el de la Universidad Católica Andrés Bello y el de Un Sueño para Venezuela, entre otros.

Esta propuesta unitaria programática que la oposición ofrece al país deberá ser ahora parte de una estrategia de acuerdos de gobernabilidad, entre los factores democráticos que se comprometan a ejecutarlo durante el gobierno de transición y que tiene como líneas de acción inmediatas la atención hacia la urgencia social y la reactivación del aparato productivo, entre otras.

El mundo también conoce los lineamientos expuestos en este compendio de propuestas que fueron igualmente presentadas a los corresponsales internacionales 48 horas antes del acto local. Además de la exposición de Diego Bautista Urbaneja, el interés de la prensa internacional fue complementado con las exposiciones de Manuel González, Aníbal Franquiz, Efraín Velásquez, Juan Antonio Herrera Betancourt, Luis Pacheco y Luis Salas.

Síntesis de la propuesta

El Plan Consenso País descansa en dos pilares fundamentales, la reconciliación y la reconstrucción de Venezuela, estableciendo una convivencia pacífica de respeto, de solidaridad nacional con justicia y sin impunidad.

Para Diego Bautista Urbaneja, la gestión del nuevo gobierno deberá tener un fuerte acento en las políticas sociales y estar enmarcada en la lucha sin descanso contra la pobreza donde se atienda a los ciudadanos de menores recursos y no un país indiferente hacia los más desposeídos, lo que él denominó “alma social”.

De acuerdo con Diego Bautista Urbaneja, la fortaleza del Plan está en el consenso entre los diversos sectores multidisciplinarios que participaron en su elaboración, beneficio que permitió darle forma a la visión de desarrollo de la Venezuela que se desea en un solo programa cumplido únicamente por el gobierno de transición. Para ello, se prevé la ejecución de ocho líneas de acción, todas hiladas y complementadas entre sí, para sentar, en la transición, la base de un cambio que tendrán que mantener los gobiernos democráticos a partir de 2006:

1.- Un país que conversa y se pone de acuerdo: la oposición busca que el próximo gobierno sea de concertación y consenso mediante la creación de espacios para el diálogo social, la reinstalación de mecanismos de concertación tripartita entre empresarios, sindicatos y gobierno con estímulo a los procesos de participación ciudadana.

2.- Un país donde hay mucho trabajo: el eje de esta propuesta es la creación de empleo productivo y para ello, se propiciará un clima de seguridad jurídica y económica que estimule la inversión privada nacional y extranjera, enviando señales de confianza para que la inversión privada asuma el papel central que le corresponde en la economía del país.

La política económica buscará orientar el gasto público hacia la inversión que genere empleo inmediato, reorientando la deuda pública y facilitando acceso al financiamiento. En este sentido, El Plan Consenso País propone implantar “reglas claras”, con un gasto fiscal disciplinado y eficiente, aumentando la recaudación fiscal, la autonomía del Banco Central y estableciendo una tasa de cambio competitivo y el control del fondo de estabilización macroeconómica.

La reactivación de los sectores con capacidad inmediata de empleo se orientará hacia la industria manufacturera, construcción, sector agrícola, turismo y el sector del comercio y los servicios.

Igualmente, el petróleo, el gas y la petroquímica serán los motores de arranque de la recuperación y diversificación de la economía. Se estima que el portafolio de nuevos negocios, a ser utilizado para atraer nuevas inversiones requerirá de 60 mil millones de dólares en 10 años, para impulsar la economía.

3.- Un país donde rige el derecho: se adoptarán medidas para establecer el equilibrio de poderes entre el ejecutivo y el legislativo, limitando el exceso de discrecionalidad existente y fortaleciendo las instituciones encargadas de aplicar justicia, como por ejemplo, la Fiscalía.

4.- Un país que atiende a los ciudadanos: se propone un marco constitucional para el desarrollo social estrechamente relacionado con la descentralización que permita disponer de redes sociales para la aplicación de políticas sociales, educativas, así como de salud, cultura, deportes y seguridad social.

5.- Un país con sus alcaldías y gobernaciones a toda marcha: la descentralización será el eje primordial para la ejecución de todas las políticas que promuevan la participación ciudadana y la eficiencia administrativa.

6.- Un país donde hay paz para adentro y para afuera: el gobierno de transición restablecerá la integridad, institucionalidad y profesionalismo de las Fuerzas Armadas; desarrollará una política de atención a las fronteras y el desarme de la población civil ilegalmente armada.

7.- Un país respetado en el mundo: se aplicará una política exterior de Estado que recupere la credibilidad de Venezuela reinsertándola como un socio cumplidor de sus obligaciones y restableciendo las sólidas relaciones con los países y bloques que han sido sus relacionados y socios naturales. Igualmente, la red diplomática del país actuará como un agente eficaz de búsqueda de oportunidades de negocios e inversiones con los socios comerciales más importantes.

8.- Una Venezuela con su petróleo en plena forma: en materia petrolera, el gobierno de transición echará las bases para rescatar y reconstruir a PDVSA, asegurando la continuidad operacional, la integridad de las instalaciones y los compromisos comerciales y financieros de la empresa. Igualmente, se restablecerá el respeto a los derechos laborales de los trabajadores de la industria que han sido despedidos o separados de sus cargos por la actual administración del presidente Chávez.

Se adoptará una política de explotación que maximice su impacto sobre el resto de la economía, buscando permitir la inversión en la industria por capitales de procedencia diversa para potenciar la creación de riqueza. En este sentido se persigue incentivar no sólo la formación de compañías nacionales, sino la participación del ahorro nacional en el sector de mayor rentabilidad de la economía venezolana.

Los negocios en el exterior serán reevaluados con las nuevas realidades del mercado petrolero, entendiendo que representan un fuerte factor de ventaja competitiva que se utilizará frente a la creciente competencia en los mercados naturales y en los emergentes. Venezuela seguirá siendo miembro de la OPEP.



send this article to a friend >>
placeholder
Loading


Keep Vcrisis Online






top | printer friendly version | disclaimer
placeholder
placeholder